miércoles, 30 de marzo de 2016

coyhaique

(Pero) sé vivir en adversidad y soledad, y lo disfruto. Limpiar energías, sanar heridas, mantener segundos de aire nuevo y desconocido. El cielo se cayó, se partió en dos en el sur; para que incrédulos como yo supieran que los tiempos han cambiado. Brindo entonces conmigo mismo, por todo lo maravilloso que estas recientes decisiones van a hacer este año. Seré consciente y prometeré constancia, pero exijo mantener el motor vital que toda buena idea necesita para funcionar. 

No hay comentarios.: