Abstract
'El 2011 fue un año caracterizado, una vez más, por cambios radicales y giros completos en mi vida. Probar cosas nuevas, nuevos rostros, nuevos quehaceres. Nuevos conocimientos, lágrimas, alegrías. De todo un poco; no se prestó para rutinas. Paros, carretes, inestabilidad. Ganas infinitas y también no tanto. Miedos y valentías inminentes. A fin de cuentas, fue año agitado. Pero ni tanto, a fin de cuentas.'
Introducción
El 2011 fue un año de cambios. Cambios para bien, cambios para mal, cambios para más que nada. De casa, de sede, de música, de ropa, de estaciones. Cosas que resultaron y fallaron a la vez. Más alegrías que tristezas. Leímos demasiadas mentes e interpretamos demasiadas opiniones. A la fecha lo seguimos haciendo, y es por eso mismo que se avanzó al punto de no retorno, a.k.a. último día del año.
Materiales y métodos
-Archivadores y hojas infinitas.
-Audífonos (con o sin música) y viajes.
-Ropa, zapatillas, zapatos.
-Croquetas de pollo y tallarines.
-Tequila y pisco sour.
-Adicciones y obsesiones.
-Amigos incondicionales.
En la categoría de 'adicciones y obsesiones' podemos encontrar: ejercicio, vicios comunes, celos, actitudes reprochables y cosas que se repiten.
Se mezclaron los materiales en cantidades proporcionales a su importancia. El resultado se trasladó a mi mente y se centrifugó hasta que lo peor precipitó. Con una pipeta se aspiraron los detritus. Se congeló todo a -20°C durante 4 meses. Se cuantificó el efecto del frío y del tiempo mediante PCR en tiempo real.
Resultados
Muchas cosas inservibles dejaron de existir, pero también cosas que sirvieron alguna vez, atrofiadas por desuso. La racionalidad primó finalmente, seguida de la incondicionalidad. Algunos productos se dañaron durante el proceso (dignidad, orgullo), al igual que órganos vitales como corazón, pulmones, hígado.
Conclusiones
El mejor método para analizar uno a uno los componentes de una mente humana, fuera del promedio, es el tiempo. Y la frialdad en menor medida.
Palabras claves: cambios, inestabilidad, congelado.
Introducción
El 2011 fue un año de cambios. Cambios para bien, cambios para mal, cambios para más que nada. De casa, de sede, de música, de ropa, de estaciones. Cosas que resultaron y fallaron a la vez. Más alegrías que tristezas. Leímos demasiadas mentes e interpretamos demasiadas opiniones. A la fecha lo seguimos haciendo, y es por eso mismo que se avanzó al punto de no retorno, a.k.a. último día del año.
Materiales y métodos
-Archivadores y hojas infinitas.
-Audífonos (con o sin música) y viajes.
-Ropa, zapatillas, zapatos.
-Croquetas de pollo y tallarines.
-Tequila y pisco sour.
-Adicciones y obsesiones.
-Amigos incondicionales.
En la categoría de 'adicciones y obsesiones' podemos encontrar: ejercicio, vicios comunes, celos, actitudes reprochables y cosas que se repiten.
Se mezclaron los materiales en cantidades proporcionales a su importancia. El resultado se trasladó a mi mente y se centrifugó hasta que lo peor precipitó. Con una pipeta se aspiraron los detritus. Se congeló todo a -20°C durante 4 meses. Se cuantificó el efecto del frío y del tiempo mediante PCR en tiempo real.
Resultados
Muchas cosas inservibles dejaron de existir, pero también cosas que sirvieron alguna vez, atrofiadas por desuso. La racionalidad primó finalmente, seguida de la incondicionalidad. Algunos productos se dañaron durante el proceso (dignidad, orgullo), al igual que órganos vitales como corazón, pulmones, hígado.
Conclusiones
El mejor método para analizar uno a uno los componentes de una mente humana, fuera del promedio, es el tiempo. Y la frialdad en menor medida.
Palabras claves: cambios, inestabilidad, congelado.
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