miércoles, 26 de mayo de 2010

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Mini-reflexión semi-inspirado en la clase de FAHE de hoy.

"Al ver las estrellas, vemos el pasado"

Sabia opinión grupal, pero un tanto incompatible con las personas (que no son pocas), cuyas cosmo-visiones del mundo se tergiversan, de tal manera, que lo onírico se confunde con la realidad. No distinguen lo que es real de lo que es fantástico. Su imaginación tiene un rol más importante que todo lo demás. No es que su capacidad mental [CI, memoria, raciocinio] se haya desvirtuado y/o haya sido opacada por la fantasía. No es eso. Es completamente distinto. Es lo siguiente: el no ver la realidad tal como es, no por falta de inteligencia, sino por convicción propia, se acerca mucho más a la descripción adecuada de la gente que intento "palabrizar". Es el saber que existe un mundo real, viviendo en uno fantástico. No me gusta el desbalance total. Tanta radicalidad hace que las personas-humanas pierdan su afán/esencia y/o metas/finalidades en torno a sus cánones (standard) de vida, previamente establecidos.
Yo me considero dentro del grupo de los que dimidian la realidad, para darle un cuarto a la fantasía y un cuarto a la mi propio pensar, a mi percepción. Me gusta así.
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