¿Qué hay en París que no haya aquí?
Más desilusiones sin un porvenir
más flores marchitas esperando
una nueva temporada
o es el sonido del viento
que me conmueve hasta el témpano de hielo
que llevo en lugar de mi corazón
en este nevado invierno
junto a la torre Eiffel
y deseando haber sido más fuerte
más capaz de exponerte mis ideas
mi cosmovisión
tus ideales y tu obstinación
te alejaron del francés
te alejaron de mí
las personas, las palomas
las luciérnagas, las cigarras
su canto, su sacrificio vital
de estar internamente con ellas
y nosotros los humanos que no podemos
estar tanto tiempo dentro de nosotros mismos
menos aún
contemplando los Campos Eliseos desde una altura
vista considerablemente volado
me figuro
mientras decidimos si el crucero por el Sena sería nuestro último destino
antes del final, muy parisino
bajo el arco del triunfo
porque al final siempre triunfa
lo que llevamos dentro del alma
una rosa sin pétalo
una hora sin minutos
un corazón sin sangre
una historia sin antagonista
Parisiera que ninguno se recuerda de lo magníficas que eran nuestras vidas
antes del amor.
Y la próxima vez que vuelvas a París, por favor,
no cargues tanto equipaje
que estorba
y llueve.